MENSAJE DE NUESTRO CAPATAZ

TENED VALOR, YO HE VENCIDO AL MUNDO

Ante la crisis sanitaria que azota la pandemia del COVID-19 en nuestro país, las procesiones en la Semana Santa han sido suspendidas para este año 2020.

En la historia de las cofradías, han sido varias las situaciones en las que las mismas se han visto obligadas a no poder realizar manifestación pública de fe y penitencia, pero a su vez, siempre existieron nuevas oportunidades para recuperarlas, así que tenemos que estar unidos ante esta decisión, más que nunca, no entendiendo esto como una tragedia, sino como un acto de responsabilidad, manteniendo la esperanza de que más pronto que tarde, el Señor y la Santísima Virgen volverán a pasear por las calles, pudiendo así las hermandades y cofradías cumplir con el sentido para el que fueron creadas.

Son muchos los años que llevo ejerciendo con ustedes el que para mí, es el trabajo más bonito del mundo, siendo evidente la nostalgia que provoca en mi persona la ausencia de los momentos que esta época del año nos permite vivir, pero a su vez, siento la alegría de mantener con vosotros una amistad que perdura todos los días del año, por lo que pronto, si Dios así lo quiere, volveremos a encontrarnos en torno a su bendita Madre.

Es tiempo de reflexión y penitencia, os recomiendo no abandonarlas. Afrontad esta situación como lo que sois, COSTALEROS, hombres de bien y obreros de Dios. Os tendré con cariño en mis oraciones, a vosotros y a vuestras familias, rogando al Señor y a la Santísima Virgen de la O por vuestro bienestar en estos tiempos que nos ha tocado vivir.

Damos cierre al trabajo en un año extraño, duro y difícil de comprender, pero lo hacemos como siempre, con las palabras que el mismo Dios nos dejó, “Tened valor, Yo he vencido al mundo”.

Recibid un abrazo en María Santísima de vuestro capataz y amigo,

Manuel J. Elena Hdez. 

Jn 16,29-33: Tened valor: Yo he vencido al mundo.

En aquel tiempo, dijeron los discípulos a Jesús:
– «Ahora sí que hablas claro y no usas comparaciones. Ahora vemos que lo sabes todo y no necesitas que te pregunten; por ello creemos que saliste de Dios.»
Les contestó Jesús:
– «¿Ahora creéis? Pues mirad: está para llegar la hora, mejor, ya ha llegado, en que os disperséis cada cual por su lado y a mí me dejéis solo. Pero no estoy solo, porque está conmigo el Padre. Os he hablado de esto, para que encontréis la paz en mí. En el mundo tendréis luchas; pero tened valor: yo he vencido al mundo.»